Protegido: ELECCIONES LEGISLATIVAS PRIMARIAS ABIERTAS SIMULTÁNEAS Y OBLIGATORIAS (P.A.S.O)
HOY! Un regalo poderoso.
“Bienvenidas todas las experiencias que los telares de destino puede tejer para ti …” Marco Aurelio.
Fuente: www.eckharttolle.com.
Protegido: ¿PORQUE ARGENTINA ES UN ESTADO Y UN PAÍS?
EL INDIVIDUO Y EL ESTADO – TODOS PARA UNO Y UNO PARA TODOS
Texto: Extracto “POLÍTICA PARA AMADOR” – Fernando Savater. Capítulo quinto
Las antiguas estructuras sociales limitaban bastante las iniciativas individuales, pero en cambio gozaban de la solidez unánime de lo que no se pone en cuestión: todos somos UNO. En cambio, la modernización concede cada vez más importancia a lo que piensa, opina y reclama cada individuo, pero debilitando inevitablemente la unanimidad comunitaria: cada cual sigue siendo UNO dentro del todo.
El individuo (o sea, cada ser humano concreto, único, irrepetible, distinto a sus vecinos) con su voluntad, su apoyo, sus decisiones, etc., es el fundamento último de la legitimidad del Estado; y el Estado sin duda se apoya y se justifica invocando los acuerdos entre los individuos, pero a la vez procura defenderse de la excesiva variabilidad de los caprichos de éstos y pretende mantener su forma contra las revocaciones constantes de lo establecido.
Cuando predomina excesivamente el individuo, la armonía del conjunto social puede romperse, nadie se preocupa de sostener lo que debe ser común a todos, los individuos mejor dotados se aprovechan de los más débiles y no reconocen ninguna obligación de solidaridad hacia ellos, cada cual se siente solo, acosado por la ferocidad y la codicia de los demás, sin una instancia comunitaria a la que exponer sus quejas y de la que recabar protección.
Pero cuando es el Estado el que se hincha demasiado, los individuos pierden su iniciativa y la capacidad de sentirse responsables de sus propias vidas, las discrepancias de los que actúan o piensan de forma diferente a los demás no son toleradas, la burocracia gubernamental se empeña en decidir hasta los más pequeños detalles del trabajo, el comercio, la salud, el arte, las creencias, las diversiones, etc., y siempre hay una autoridad que sabe lo que es bueno para cada uno mejor que él mismo.
Desde luego, por uno y otro lado estos excesos pueden ser nefastos.
Los individuos tenemos dos maneras de formar parte de los grupos sociales, que suelen darse por separado pero a veces se dan juntas. Podemos pertenecer al grupo y podemos participar en él.
La pertenencia al grupo se caracteriza por una entrega del individuo incondicional (o casi) a la colectividad, identificándose con sus valores sin cuestionarlos, aceptando que se le defina por tal adhesión: en una palabra, formando parte irremediablemente, para bien o para mal, de ese conjunto.
La participación, en cambio, es algo mucho más deliberado y voluntario: el individuo participa en un grupo porque quiere y mientras quiere, no se siente obligado a la lealtad y conserva la suficiente distancia crítica como para decidir si le conviene o no seguir en ese colectivo.
En la pertenencia a un grupo lo que cuenta es SER del grupo, sentirse arropado e identificado con él; en la participación lo importante son los objetivos que pretendemos lograr por medio de la incorporación al grupo: si no los conseguimos, lo dejamos.
Todos los individuos tenemos necesidad de sentir que pertenecemos a algo, que somos incondicionales de algo, sea una corporación muy importante o algo trivial. Eso nos da seguridad, nos estabiliza, nos define ante nosotros mismos, nos brinda alguna referencia firme en la que confiar, aunque tal pertenencia a menudo nos haga sufrir o nos imponga sacrificios.
Pero también es importante para el individuo sentirse participando voluntaria y críticamente en diversos colectivos: de ese modo conserva su propia personalidad y no deja que el conjunto se la imponga, elige sus fines, se siente capaz de transformarse y de rebelarse contra las fatalidades, comprende que a veces es mejor «traicionar» a los otros que seguir a los otros ciegamente y «traicionarse» a sí mismo.
Siendo imprescindibles por tanto ciertas pertenencias como ciertas participaciones, hay que reconocer que cada uno de estos dos estilos de integrarse en los grupos presenta sus problemas. Los abusos de la pertenencia desembocan en el fanatismo y la exclusión, los de la participación mal entendida llevan al desinterés y a la insolidaridad.
Lo malo de la pertenencia incondicional a una comunidad es que el afán de sentirse unido a los demás haga aparecer como «naturales» los vínculos políticos que nos unen a los otros. En los países modernos por ejemplo se suele creer que sus fronteras, su forma de vida, sus prejuicios y sus instituciones son algo casi «sagrado».
Lo malo de la pertenencia fanática a una comunidad sin más argumento que la de ser «la nuestra», que «los de aquí somos así», es que se olvida que se puede SER HUMANO de muchas maneras y no encerrarse obstinadamente en «lo que siempre ha sido así» y en lo que nuestro grupo consideró como «perfecto y natural» hasta ayer. La gracia no está en emperrarnos en ser lo que somos sino en ser capaces, gracias a nuestros propios esfuerzos y a los de los demás, de llegar a mejorar lo que somos.
A fin de cuentas, lo que importa no es nuestra pertenencia a tal nación, tal cultura, tal contexto social o ideológico, sino nuestra pertenencia a la especie humana, que compartimos necesariamente con los hombres de todas las naciones, culturas y estratos sociales.
De ahí proviene la idea de unos derechos humanos, una serie de reglas universales para tratarnos los hombres unos a otros, cualquiera que sea nuestra posición histórica accidental. Los derechos humanos son una apuesta por lo que los hombres tenemos de fundamental en común, por mucho que sea lo que casualmente nos separa. Defender los derechos humanos universales supone admitir que los hombres nos reconocemos derechos iguales entre nosotros, a pesar de las diferencias entre los grupos a los que pertenecemos: supone admitir, por tanto, que es más importante ser individuo humano que pertenecer a tal o cual raza, nación o cultura. De ahí que sólo los individuos humanos puedan ser sujetos de tales derechos.
Protegido: CONCEPTOS Y DEFINICIONES SOBRE EL TRABAJO
El “Elemento” es donde tus aptitudes naturales satisfacen tus pasiones personales.
“Escoge un trabajo que te gusta, y nunca tendrás que trabajar un día en tu vida.” Confucio.
¿Estás en tu elemento? El elemento es donde sus aptitudes naturales satisfacen sus pasiones personales. Es el punto en el que el talento natural, se une con la pasión personal. Podrías estar jugando la guitarra, el baloncesto, cocinando, enseñando, trabajando con la tecnología o con los animales – cualquier cosa para la que tienes una sensación natural. Y sentirte feliz con ello.
Cuando las personas llegan o consiguen su Elemento, se sienten más sí mismos, más inspirados y alcanzan sus niveles más altos de gestión. Las personas que tienen éxito, y que no pueden imaginarse haciendo otra cosa que la que hacen, reconocieron en algún momento sus talentos y se ganan la vida haciendo aquello que les apasiona. Alcanzan el éxito y la satisfacción personal por lo que hacen. Descubrieron aquello que de forma natural les sienta bien y les entusiasma hacerlo.
Por ello encontrar tu Elemento es esencial. Ello te conducirá a una vida llena de pasión, de confianza en ti mismo y a la realización personal.
Puede ser que actualmente estés frustrado porque no sabes cuáles son sus talentos y pasiones reales. Que estés preguntándote qué carrera seguir y por qué. O tratando de decidir si ir a la universidad o hacer alguna otra cosa en su lugar. Pero lo cierto es que tu Elemento esta para ser descubierto por ti. Y si bien un paso esencial en la búsqueda de tu Elemento es entender tus propias aptitudes innatas. Conseguir estar en tu Elemento es más que hacer las cosas para las que eres bueno. Es también amar lo que haces. Por ello la búsqueda de tu elemento es un camino de dos vías: un viaje a tu interior para explorar el mundo dentro de ti; y un viaje de ida a tu exterior para explorar el mundo que te rodea. Y sólo tu sabrás si has llegado o si necesitas seguir adelante con el próximo horizonte.
Ahora bien, reflexionemos sobre una secuencia que puede ayudarte a saber qué buscar en tu viaje hacia tu Elemento. La secuencia es: Lo entiendo, Me encanta, Lo quiero, ¿Dónde está?.
“Lo entiendo” (El Talento): Es observar y descubrir la facilidad natural que tienes para hacer una cosa. Es una percepción intuitiva o una comprensión de lo qué es una cosa, de como funciona y de como utilizarla.
“Me encanta” (La Pasión): No es solo una cuestión de capacidad natural. Hay personas que por naturaleza son buenas para algo pero que no sienten que ese algo sea la vocación de sus vidas. Entonces, se necesitará algo más que hacer algo bien y fácil: necesitas ¡Apasionarte!. Encontrar gran deleite y placer en lo que haces. Entonces, debes estar atento además de aquello que haces bien sin mucho esfuerzo, a aquello que además te apasiona hacerlo.
“Lo quiero” (La Actitud): A menudo las personas que aman lo que hacen se describen a sí mismas como afortunadas. Y las que no logran el éxito consideran no que han tenido mas suerte. En realidad lo aleatorio y accidental tiene su parte en la vida de todo el mundo. Pero tener suerte o no depende de algo mas que la mera casualidad. Tener suerte es “Preparación más Oportunidad”. Por ello con frecuencia las personas que triunfan comparten actitudes de compromiso con la tarea, de preparación, de perseverancia, de confianza en sí mismos, y son optimistas.
“¿Dónde está?” (La Oportunidad): Si no se dan las oportunidades adecuadas es posible que nunca llegues a saber cuales son tus aptitudes o hasta donde podrían llevarte. Las aptitudes no llegan hacerse patentes a menos que tengamos la oportunidad de utilizarlas. Entonces depende también de las oportunidades que tengas, de las que puedas crear, de si las aprovechas y de cómo lo haces. No pierdas de vista que la forma de percibir nuestras circunstancias, así como la de crear y aceptar las oportunidades depende, en gran medida, de lo que esperas de ti mismo .¿Que esperas para ti?
Fuente: http://sirkenrobinson.com/?p=797
La deserción escolar no comprende a los aburridos, apáticos, desinteresados ….
Un informe de la UNESCO Global Education Digest* de 2010, en el que se afirma que la Argentina es uno de los países de la región con más baja tasa de graduación en el secundario: sólo un 43 por ciento de los estudiantes secundarios de nuestro país culminan sus estudios en los plazos establecidos. Y sólo un 50% del total de estudiantes secundarios accede a ese título. Esa estadística esta indicando que sólo un escasísimo porcentaje (aproximadamente el 31%) de los alumnos que ingresan en primer grado logra completar todo el ciclo educativo según establece la ley de educación. Ello a pesar del dinero que se destina a la educación y a las iniciativas que se llevan a cabo para tratar de mejorar la educación.
Ahora bien, tales preocupantes índices de deserción escolar refieren a chicos que dejan sus estudios, pero no comprende los niños que continúan en la escuela, pero que se desconectan de ella, que no gozan de la misma, que no reciben ningún beneficio real de la misma. O sea que a aquellos niños que dejan la escuela también habría que sumar a los que la escuela no desarrolla.
El problema es que todo el esfuerzo de la educación para reducir la deserción escolar va en la dirección equivocada. Hoy mas que nunca es palpable que existe una contradicción entre la educación actual y los tres principios sobre los que florece la vida humana.
El primer principio es que los seres humanos son naturalmente diferentes y diversos.
Se alienta a que las escuelas averigüen lo que los niños pueden hacer a través de un espectro muy estrecho de logro. Se redujo el enfoque a las llamadas disciplinas básicas, que si bien son muy importantes como la ciencia y las matemáticas, no son suficientes. Una verdadera educación tiene que dar la misma importancia a las artes, las humanidades, a la educación física. Los niños prosperan mejor con un amplio currículo que ponga en juego los diversos talentos de los chicos, y no sólo una pequeña gama de ellos.
Un efecto de todo ello es que actualmente, algo así como el 10 por ciento de los niños están siendo diagnosticados por trastorno por déficit de atención. Y no es que no exista tal disfunción, sino que en realidad esta lejos de ser una epidemia. La educación debiera comprender definitivamente que las artes no sólo son importantes porque mejoran las calificaciones de matemáticas por ejemplo. Son importantes porque llegan a las partes del ser de los niños que de otra manera quedan intactas, y sin desarrollar.
Finlandia, que está a la cabeza en la enseñanza de matemáticas, ciencias y lectura, no se obsesionan con esas disciplinas. Sino que tienen un enfoque más amplio a la educación, que incluye las humanidades, la educación física, las artes.
El segundo principio que impulsa la vida humana es la curiosidad.
La curiosidad es el motor del éxito. Sin embargo se anima a nuestros niños y maestros a seguir una rutina en lugar de excitar que el poder de la imaginación y la curiosidad. En lugar de la curiosidad, lo que tenemos es una cultura de cumplimiento.
El fin de la educación es el aprendizaje. Si no hay aprendizaje no hay educación. El fin entero de la educación es conseguir que la gente aprenda. Ahora bien, seguramente la mayoría de los involucrados en la educación actual pueden creer estar involucrados en dicha actividad, cuando en realidad no están logrando sus objetivos.
Parte del problema es que la cultura dominante de la educación ha llegado a centrarse en no enseñar y aprender, sino en medir el conocimiento por medio de exámenes. Y si bien las evaluaciones estandarizadas tienen un lugar, no deben ser la cultura dominante de la educación. Ellas deben ser de diagnóstico. Deben ayudar, pero no deben ser el centro de la enseñanza.
Los docentes son el elemento vital del éxito de las escuelas. Y no hay escuela del país que sea mejor que sus docentes, quienes no están allí sólo para pasar la información recibida. Están también para estimular, provocar, participar. La enseñanza es una profesión creativa. La enseñanza, adecuadamente concebida, no es un sistema de administración y control.
Y el tercer principio es el siguiente: que la vida humana es inherentemente creativa.
Creamos nuestras vidas y podemos crearlas a medida que avanzamos a través de ella. Todos creamos nuestras propias vidas a través de este proceso inquieto de imaginar alternativas y posibilidades. Por lo que una de las funciones de la educación es despertar y desarrollar estos poderes de creatividad. En cambio, lo que tenemos es una cultura de la normalización.
Todos los sistemas de alto rendimiento en el mundo lo que hacen en primer lugar es individualizar la enseñanza y el aprendizaje. Reconocen que se trata de estudiantes que están aprendiendo y que el sistema tiene que seducirlos, animar su curiosidad, su individualidad y su creatividad. Así es como se consigue que aprendan.
En segundo lugar atribuyen un status muy alto en la profesión docente. Ellos reconocen que no se puede mejorar la educación si no elige la gente adecuada para enseñar y si no mantienen un apoyo constante y el desarrollo profesional de los docentes.
Y en tercer lugar, transfieren la responsabilidad a nivel de la escuela para hacer el trabajo de educar. El problema es que la educación no sucede en las salas de las comisiones de los edificios legislativos o ministerios. Esto ocurre en las aulas de las escuelas, y las personas que la llevan a cabo son los maestros y los alumnos.
El punto es que la educación no es un sistema mecánico. Es un sistema humano. Se trata de personas, las personas que, o bien quieren aprender o no quieren aprender.
Cada estudiante que abandona la escuela o que no es desarrollado por la misma tiene una razón para ello que tiene sus raíces en su propia biografía. Les puede resultar aburrido. Les puede resultar irrelevante. Pueden encontrar que es contraria a la vida que están viviendo fuera de la escuela. Hay tendencias y particularidades pero las historias son siempre las mismas.
Lo interesante es que cuando se diseñan programas alternativos para que los niños vuelvan a la educación, todos tienen ciertas características comunes: Son muy personalizados. Tienen un fuerte apoyo de los maestros. Un plan de estudios amplio y diverso. Y con frecuencia los programas involucran a los estudiantes fuera de la escuela, así como dentro de la escuela. Y lo llamativo es que si en educación hiciéramos todo ello, ciertamente no habría necesidad de un programa alternativo.
Habrá que reconocer que la educación es un sistema humano, y que hay condiciones en las que las personas se desarrollan y condiciones en las que no lo hacen. Y que se puede cambiar las escuelas, si se cambian las condiciones de vida en la misma. Si se otorga a la gente un sentido diferente de la posibilidad, un conjunto diferente de expectativas, una gama más amplia de oportunidades, que aprecie y valore las relaciones entre profesores y alumnos, que ofrezca a las personas la facultad de ser creativos e innovar en lo que hacen. El verdadero papel de liderazgo en la educación, a nivel nacional y a nivel de la escuela, no es y no debe ser mando y control administrativo. El verdadero papel de liderazgo en la enseñanza es el control del clima de posibilidades. Si se hace, la gente logrará cosas que no previó y no había esperado lograr.
*http://www.uis.unesco.org/Library/Documents/SPA_GED2010_WEB_140311.pdf
Fuente: Ken Robinson: How to escape education’s death valley. FILMED APR 2013 • POSTED MAY 2013 • TED Talks Education. http://www.ted.com
No dejes que estos 10 errores comunes que pueden echar por tierra tus posibilidades de éxito en los exámenes.*
No hay muchos estudiantes que admitan que disfrutan de realizar exámenes o ensayos, pero si deseas conseguir un título, son un calvario al que tienes que sobrevivir.
Así que hemos trabajado la manera de hacer todo el asunto un poco menos estresante. Hemos persuadidos a cuatro académicos de una amplia gama de temas que nos diga los diez errores más comunes que los estudiantes cometen en los exámenes.
Esto es lo que han dicho:
El pánico y la dilación
A veces, una tarea puede sentirse tan abrumadora que es difícil de empezar. La dilación se hace cargo y parece que no se puede hacer nada. La página en blanco, sin tocar y al descubierto es un enemigo formidable cuando se te observa desde el escritorio del profesor. Trata de no entrar en pánico, protege y administra tu tiempo de preparación, y no dejes de empezar a trabajar en el examen.
La falta de análisis
Puede ser tentador contestar como un loro lo que sabes. Pero para demostrar su comprensión debes comprometerte críticamente con el material de origen visto en el curso. Siempre asume la actitud de un lector informado – no es necesario un resumen de la trama o de biografías de figuras clave.
La mala planificación
En los exámenes es vital tomar los primeros cinco a 10 minutos para leer el cuestionario y planificar las preguntas que vas a responder. Asegúrate de marcar las preguntas más fácil de responder en primer lugar, antes de tratar cuestiones que son más difíciles. Estas última a menudo te hacen perder la confianza y el tiempo.
No leer la pregunta correctamente
Los estudiantes suelen ensayar respuestas en su cabeza. Cuando hay preguntas que les obliga a pensar y reflexionar. Pero en su lugar, los estudiantes a menudo escribir una respuesta ensayada. Esto se puede evitar tomando un tiempo para reflexionar sobre la cuestión, en lugar de ver que el tiempo como perdido y apurarse a llenar las páginas.
Centrándose en la cuenta de la palabra
En las respuestas del examen los estudiantes están a menudo más preocupados por la cantidad y no por la calidad. Los mejores trabajos son los que demuestran la evidencia de la reflexión personal y que no están tratando de conseguir un límite de palabras.
Lectura insuficiente alrededor de un tema
Durante la preparación, los estudiantes son muy selectivos en lo que optan por leer, seleccionando los textos y recuerdo tanto como sea posible de ellos. La confianza, sólo se puede lograr mediante la mayor cantidad de lectura sobre un tema. Esto también requiere otorgar mayor de tiempo para leer, y no dejar la preparación para unos momento antes del examen.
Regurgitando material de una clase o una conferencia
La originalidad de pensamiento está respaldada por pruebas y los profesores no queremos que tomes nuestras formulaciones como la verdad del Evangelio. Sino que buscamos te desafíes y pienses por tí mismo.
El exceso de generalización
Siempre asegúrate de que tus declaraciones sean específicos.
Descuido
Equivocarse en los nombres de los personajes y otros detalles básicos simplemente huele a no preocuparse.
Ortografía, gramática y registro
Los colegios y universidades tienen un español o inglés académico estándar en el que se debe escribir. La mejor manera de alcanzar la competencia en esto es leer un gran número de artículos en revistas académicas y libros que reflejan el registro, el lenguaje y el tono (pero no el contenido: no plagiar). También puede ayudar, escribir pequeños ensayos cada día como una forma de práctica.
*http://www.guardian.co.uk/education/2013/apr/30/student-advice-exams-success
5 LECCIONES DE INNOVACIÓN QUE PUEDES APRENDER EN LA PISTA DE BAILE.
Danzar es instintivo, creativo y una metáfora perfecta para el proceso de innovación.
Por Erica Dhawan*
Las grandes lecciones de liderazgo que he aprendido han producido en la pista de baile. El baile es una forma experiencial de ser, aprender y hacer. Mover los músculos nos ayuda a entender las cosas de forma totalmente novedosa.
He bailado toda mi vida. Soy una bailarina de Bollywood**, pero también soy una experta en liderazgo reconocida a nivel mundial, y utilizo el movimiento en todo mi trabajo. A través del movimiento, creo que podemos inspirar la creatividad, la escucha profunda, y el aprendizaje intergeneracional.
¿Por qué el movimiento? Nuestras mentes y cuerpos están intrínsecamente vinculados, y el movimiento actúa como mensajero entre los dos. Cuando somos capaces de comprender nuestros propios movimientos y los de los otros, nuestra capacidad para colaborar y aprovechar nuestros intuición se dispara. Y cada vez más la investigación en muchas disciplinas – desde la neurociencia a la medicina deportiva, desde la psicología a la antropología – apoya estas ideas.
Aquí, está lo que he aprendido de todos esos años de vibración de caderas:
1. Asociación
la Danza nos enseña sobre el tira y afloja de la asociación, intelectual, visceral y cinética. Las parejas de baile a aprenden a trabajar juntos, se mueven juntos, y a escucharse unos a otros, para remover errores pasados. La Danza enseña la confianza. Como innovadores, hacemos lo mismo. Nuestra colaboración en equipos y grupos nos permite abrir nuevas formas de trabajar con los demás, a veces a la cabeza, conduciendo y, a veces detrás, siguiendo. Sin perjuicio de quien está liderando o conduciendo, siempre estamos en asociación con un movimiento o una organización más grande.
2. Adaptabilidad
El experto en liderazgo Ron Heifetz de la universidada Harvard utiliza la metáfora de la danza a través de su famoso libro “La práctica del liderazgo adaptativo”: Cuando nos adaptamos como innovadores o nos movemos como bailarines, probamos nuevas variaciones de trabajo. Esta adaptabilidad reúne a lo físico, emocional e intelectual que alimenta todo nuestro trabajo como innovadores. El aprendizaje de nuevas medidas y la combinación en un baile es un desafío de expresión en libertad dentro de un ambiente controlado. Simplemente aprender un nuevo paso de baile ayuda a desarrollar vías neurológicas y nos hace más experto en la solución de problemas en cualquier área de nuestra vida. Los desafíos en el movimiento, reconfiguran el cerebro para una mayor capacidad en su trabajo.
3. Variación
En la danza y en la innovación, a menudo nos centramos en un “evento final.” La variación de aprendizaje permite a los innovadores la práctica del proceso de descubrimiento en su vida laboral. Twyla Tharp, coreógrafa y autora del libro “El hábito creativo: aprenderlo y utilizarlo para la vida”, pidió a sus bailarines para invertir sus movimientos como si fueran un espejo de sí mismos. Esta pequeña variación crea una nueva forma entera baile llamado variación inversa. Del mismo modo, un líder innovador puede probar rápidamente nuevas variaciones de trabajo y luego decidir cuál funciona mejor en lugar de hablar una y otra vez hasta la saciedad.
4. Investigación
Las preguntas que nos hacemos a nosotros mismos como bailarines son preguntas que debemos hacernos como innovadores. Piense en su trabajo como una obra de arte que está creando.¿Cuales dificultades presenta? ¿Cómo se estructura? ¿Qué es lo que mantiene la pieza unida? ¿Cuál es el proceso de ensayo de la obra?¿Qué juicios u opiniones va recibiendo? ¿Cómo se puede sostener a sí misma?
5. Público
La construcción de un público como un innovador o bailarín es acerca de con quién se puede conectar. La mayoría de las personas asisten a un espectáculo, porque han sido alentados a verlo o porque se refiere a algo que le interesa. Preguntémonos a nosotros mismos: ¿Qué condiciones deseo construir para el éxito? Gran parte de ello se trata de compartir nuestras ideas desde el principio con los demás y abrazarlos, como lo haría en una primera actuación de danza. Además, como en la danza, la parte más importante del negocio de la innovación es el proceso de llevar a la superficie los conocimientos para usarlos de una manera diferente. Innovadores reunidos en una habitación se dan permiso para ver, comentar, o arreglar. Y como sea, gran parte de la innovación es observar y notar cada vez más voces en la habitación.
La Danza, como la innovación, ayuda a las personas a involucran su real poder. No arregla o corrige, ayuda a encontrar las herramientas para la encontrar el camino para pasar de lo que imaginamos o visualizamos a lo que es real.
*Erica Dhawan es experta mundialmente reconocida en liderazgo, oradora y consultor corporativo para impulsar el rendimiento de élite. http://ericadhawan.com
**La danza Bollywood surge de las coreografías de las películas de los estudios cinematográficos de la ciudad hindú de Bombay (Bollywood). Mezclan diferentes movimientos, desde la danza clásica india, los bailes folclóricos de varias zonas del país y los bailes más modernos desde el jazz, funky, hip hop hasta la samba y la salsa.
Fuente: The National Creativity Network.
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