El valor de las afirmaciones positivas.

Todos los pensamientos que hemos tenido viajaron por nuestro organismo biológico y activaron una reacción fisiológica. Todos los pensamientos, al margen de su contenido, entraron en nuestros sistemas corporales en forma de energía y produjeron reacciones biológicas que luego se almacenaron en la memoria de nuestras células. Así, nuestra biografía se teje en nuestro sistema biológico, poco a poco, lentamente, día a día. Es por ello que todo pensamiento posee una energía que nos fortalecerá o nos debilitará.

Está claro entonces que no tenemos tiempo para  perder en pensamientos negativos. Cada vez que pensamos un pensamiento que nos hace sentir mal de cualquier manera, no sólo hemos perdido la oportunidad de tener un pensamiento positivo y crear una gran vida para nosotros mismos, sino que hemos ampliado el montón de pensamientos negativos que traen experiencias incómodas y nocivas para nosotros.

Debemos aceptar que nuestro poder está en los pensamientos que elegimos pensar hoy. Que cada pensamiento que pensamos estará creando nuestro futuro. Y que podemos aprender a pensar positivamente por medio de afirmaciones positivas. Precisamente los momentos que dedicamos en afirmar, son los momentos en los que creamos nuestros mañanas. Son los momentos en que nos convertimos en arquitectos de nuestra vida.

Una afirmación es una declaración que nos hacemos a nosotros mismos, y que si la usamos constantemente, llega a convertirse en una creencia que siempre producirá resultados, a veces en formas que ni siquiera podemos imaginar.

Podemos decirnos en voz alta o pensar para nosotros mismos una afirmación durante todo el día, como por ejemplo, podemos decirnos una y otra vez:  “Está todo bien”, o “Sí, puedo hacerlo!”, o “Estoy mejor, mejor y mejor. Mejor en toda forma y sentido”, o “Yo soy el único pensador en mi mente, y yo elijo pensar pensamientos alegres, felices, amorosos”. O podemos tener una lista de 20 afirmaciones y decir o escribir una cada día. El número de veces que decimos o escribimos una afirmación realmente depende de cada uno.

Pero lo cierto es que si queremos, podemos pensar en cosas que nos hacen sentir feliz. Podemos pensar sólo en todo lo bueno en el mundo. Podemos saludar el día con una sonrisa. Podemos expresar gratitud a cada paso. Podemos amar a nuestros cuerpos. Podemos ser nuestro mejor amigo. Podemos siempre elegir tener pensamientos positivos.

Y, si llega un pensamiento negativo, lo CANCELAMOS!. Nos repetimos que lo CANCELAMOS y seguimos positivamente. Sin lucha ni oposición, lo CANCELAMOS y seguimos.

Sí bien se necesita voluntad para obtener el control sobre nuestros pensamientos, vale la pena intentarlo. La recompensa es ver día a día como nuestras vidas se convierten en los más alegres, amorosas, saludables, fabulosas y prósperas experiencias.

Piensa bien y saldrá bien!

Fuente:
Louise L. Hay, “Tus pensamientos crean tus mañanas”. http://www.healyourlife.com.  Autora del bestseller internacional “Usted puede sanar su vida”. Con más de 50 millones de libros vendidos en todo el mundo. Conferencista durante más de 30 años  ayudando a la gente de todo el mundo a descubrir y poner en práctica todo el potencial de sus propios poderes creativos para el crecimiento personal y auto-curación.
Caroline Myss, “La medicina de la energía”. Autora y conferencista internacional en el campo de la conciencia humana. http://www.myss.com

 

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Una respuesta a El valor de las afirmaciones positivas.

  1. Conchita dice:

    Mi comentario pues quiero llegar a ese nivel afirmaciones positivas para mi misma para que mi calidad de vida sea rica en ese aspecto.no he tenido buenas experiencias en mi vida y no quiero llenarme de amargura.

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