Los jóvenes de hoy representan la generación mas brillante que ha vivido en nuestro planeta. Pero, a su vez, el mundo en el que les toca actuar también es un mundo que podemos calificar como sin igual a otro anterior. Este mundo exige desarrollar njevas competencias y cualidades que les ayuden a encarar con éxito los constantes desafíos de los cambios constantes y cada vez mas rápidos.
Por lo tanto, las habilidades que necesitan los jóvenes de hoy no están solamente ligadas a los mejores logros académicos que alcancen, sino que también con desarrollar, en lo personal, una valoración adecuada de sí mismo, con el autocontrol, con el manejo de las emociones, con la adaptabilidad y la iniciativa; y, en lo social, con el desarrollo de la empatía, de la creación de vínculos, el trabajo en equipo, y la colaboración.
Ese parece ser el desafío de los jóvenes actuales respecto del mundo en el que les toca vivir y desarrollarse. Pero, a su vez los adultos debemos reconocer y aceptar que también tenemos un rol fundamental que cumplir.
El panorama nos obliga a no quedarnos de brazos cruzados. Los adultos debemos comprometernos en ayudar a los jóvenes en tal desafío. Tarea que incluye necesariamente dos aspectos fundamentales, uno prestar plena atención a los que los jóvenes hacen intentando vivir su propio camino, y otro, mostrar lo que nosotros los adultos estamos haciendo intentando vivir el nuestro.
Observar detenidamente sus acciones, nos dará la posibilidad de ayudarles a que identifiquen sus dones y talentos naturales, sus pasiones, sus necesidades, y que encuentren hacia dónde apuntar sus energías y sus elecciones. Mostrar las nuestras, es la única forma de señalarles todo lo anterior con algún grado de éxito.
Piensa bien y saldrá bien!
D.O.